De punta en blanco. Real Madrid

Mucho se ha hablado de la derrota del Madrid ante el Sporting. No tengo nada nuevo que aportar, por lo tanto, no escribiré una sola línea sobre el plano deportivo de este encuentro para no caer en la redundancia. Sin embargo, sí me parece oportuno incidir sobre varios gestos de Mourinho tras el partido.

Ese carácter revanchista que existe en la prensa española se ha vuelto a destapar en los últimos días. Desde el principio de la temporada, estaban esperando con la escopeta cargada a un tropiezo tan importante como el del Sporting para disparar a diestro y siniestro contra Mourinho. El de Setúbal les rompió los esquemas y volvió a dejar claro que una cosa es el papel que interpreta de malo de la película para liberar de presión a sus jugadores y otra bien distinta que no sea capaz de aplaudir a un rival como el equipo de Preciado.

Más de uno tuvo que empezar a borrar líneas de su columna de opinión cuando el técnico del Sporting salió en rueda de prensa a confirmar que Mourinho había entrado al vestuario a felicitar a sus jugadores. Pero la Liga está casi perdida, el Madrid lleva menos puntos que el año pasado y ante este descalabro siempre hay que bucar culpables. Por encima de todos, como siempre, el entrenador. Tal vez por eso se ha sacado de contexto su frase de que "el 0-0 sería un buen resultado contra el Tottenham". Su conclusión es que ante el Sporting no valía el empate, pero ante el Tottenham queda un partido de vuelta. Dejo el vídeo de la rueda de prensa completa y que cada uno saque sus propias conclusiones:

Con la Liga casi imposible y la sombra de poder perder la Copa ante el Barça, la Liga de Campeones es la única tabla de salvación de la temporada. Si los blancos son capaces de levantar la Décima, Mourinho habría borrado de un plumazo todas las dudas. Eso sí, el camino no será fácil. El Madrid tiene mimbres para llegar a Wembley, pero como quedó claro ante el Sporting, para eso necesita contar con todas sus figuras. Cristiano y Marcelo no podían perderse una noche que desde hace muchas temporadas no se vive en el Bernabéu. Ya no hay excusas. Mourinho se la juega todo a una carta.

Publicado el 4 de abril de 2011 a las 15:00.

Al final, ni regreso de Raúl al Bernabéu ni Clásico en Liga de Campeones. El sorteo de los cuartos de final de la máxima competición continental de clubes ha deparado un Real Madrid-Tottenham Hotspurs, una eliminatoria que supondrá un peldaño más que la del Lyon por la categoría del rival. Además, los blancos no han tenido la suerte de cara y jugarán la vuelta en White Hart Lane.

Con esto, no se producirá el regreso de Raúl al estadio merengue, pero sí el de un jugador cuya salida también ha estado cuestionada: Rafael Van der Vaart. Al holandés le han bastado pocos meses para reafirmarse como líder del equipo de Redknapp. Junto a él, los londinenses tienen un centro del campo realmente completo, desde el orden de Wilson Palacios o Huddlestone hasta la creatividad de Modric y Kranjcar, pasando por la velocidad de Lennon y Bale.

Mientras, el Barça se verá las caras con el Shakthar, un equipo que parece inferior a los de Guardiola pero que ya les ganó hace dos temporadas y que tiene un equipo lleno de brasileños con mucha calidad. El sorteo ha querido que tanto blancos como culés deban afrontar un partido decisivo como visitantes a pocos días del 'Clásico' liguero. Con esto, el mes de abril del Madrid es de aúpa. A saber: Sporting, Tottenham, Athletic (en San Mamés), Tottenham (Londres), Barça, final de Copa, Valencia (Mestalla) y posible partido de ida de semifinales de la Champions. Llega el momento de la verdad.

Publicado el 18 de marzo de 2011 a las 12:15.

Eran poco más de las 22:30 horas cuando Damir Skomina señaló el final del encuentro entre el Real Madrid y el Olympique de Lyon. Los jugadores blancos se fueron abrazando, conscientes de la liberación que suponía acabar de un plumazo con dos supuestas maldiciones: la de los octavos de final y la del Olympique de Lyon.

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Publicado el 17 de marzo de 2011 a las 13:15.

Quedan poco menos de cuatro horas para que el Real Madrid demuestre si ha aprendido algo de sus errores del pasado. Hace un año, los blancos se plantaron en el encuentro de vuelta de estos octavos de final con la convicción y casi el desprecio, de que pasarían de ronda. El gol de Pjanic vino a demostrar que esto es la Champions y cualquier equipo, por muy inferior que parezca, se transforma desde el momento que suena ese himno basado en un tema de Händel.

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Publicado el 16 de marzo de 2011 a las 16:30.

Quién nos iba a decir semanas atrás que la mayor polémica del curso no iba a tener su origen en la boca de José Mourinho. Mientras se sigue hablando de si la Cope actuó bien o no en referencia a la supuesta petición de controles antidopaje "más serios", el Real Madrid se juega buena parte de su crédito en poco más de 24 horas.

El Madrid se ha malacostumbrado a tropezar muchas veces en la piedra de los octavos de final. Si para un grande de Europa estar fuera de las rondas finales durante seis temporadas consecutivas es casi imperdonable, para el club blanco es un verdadero drama. Detrás de esas eliminaciones han estado gran parte de las razones por las que técnicos como Bernd Schuster o Fabio Capello hicieron las maletas a pesar de haberle ganado la Liga al Barça de Ronaldinho y Eto'o.

Pues bien, Mourinho ha comparecido en rueda de prensa intentando jugar al despiste pero dejando claro que una de las causas por la que fue contratado es su capacidad para preparar eliminatorias a doble partido. Ante el Lyon no hay excusas. Todos saben lo que hay en juego y nadie quiere perderse la cita, incluido Cristiano Ronaldo.

"Tengo un plan de juego y una idea del partido. Si Cristiano juega, bien y si no habrá otro jugador fenomenal. Tenemos un equipo y así hemos llegado hasta aquí y queremos continuar". Esto fue lo que ha comentado Mourinho. Pese a todo, es casi seguro que el portugués estará en el once, aunque los antecedentes aconsejan que si no está al 100% es mejor que no sea de la partida.

La semana pasada Cesc Fábregas forzó para estar en el partido ante el Barça y el resultado final fue horrible: derrota, eliminación y recaída en la lesión. De eso mismo puede dar fe Ronaldo quien el año pasado forzó para jugar con Portugal y acabó cayendo lesionado para varias semanas. En esto del fútbol, aunque algunos insinúen lo contrario, no hay milagros y la leyenda de El Cid y otras epopeyas se quedan para la literatura. Contra el Lyon sólo vale pasar y eso se logrará contando con los 11 que mejor estén, no atendiendo al nombre del futbolista.

Publicado el 15 de marzo de 2011 a las 16:45.

No hubo sorpresa. El Barça impuso su ley y se acabó llevando la eliminatoria frente al Arsenal en un encuentro en el que el equipo inglés defraudó notablemente a las expectativas creadas. Algunos están usando la expulsión de Van Persie para justificar una eliminación que el propio equipo 'gunner' se fue forjando poco a poco.

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Publicado el 9 de marzo de 2011 a las 16:45.

No se rompió el maleficio de Gerland, pero al menos el Madrid llegará al partido de vuelta con unas sensaciones bien diferentes a las del año pasado. Pese al empate a uno, bien harían los blancos en repetir dentro de tres semanas en el Santiago Bernabéu el arrollador inicio que tuvieron el año pasado ante el equipo de Claude Puel.

Se ha podido leer y escuchar muchas opiniones al respecto de la reacción de Florentino Pérez en el palco. Para mí, lo único que queda claro es que los octavos de final se han convertido en un verdadero muro psicológico para los blancos y por eso, el presidente blanco dio rienda suelta a sus sentimientos. En contra de la teoría de Butragueño (aquello del 'ser superior') Pérez demostró que es de carne y hueso y sufre como cada mortal aficionado merengue.

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Publicado el 23 de febrero de 2011 a las 17:30.

Tres visitas, tres derrotas. El balance del Real Madrid en el Stade de Gerland no puede ser más desolador. Las tres veces que los blancos han jugado en el campo del Olympique de Lyon han salido derrotados, en algunas ocasiones humillados y siempre con la incapacidad de meter un solo tanto como nota común.

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Publicado el 21 de febrero de 2011 a las 15:15.

En el fútbol es un deporte en el que se tiende al dramatismo. La altas expectativas que en muchas ocasiones creamos los medios de comunicación en torno a determinados jugadores hace que éstos salgan al terreno de juego como el condenado que saltaba a la arena del anfiteatro romano.

Por eso, ver a un futbolista sonreír sobre el césped es síntoma de éxito, de liberación. Benzema estaba preso hasta este miércoles de esa tensión que causa el run-run con el que debe convivir cada futbolista que viste la camiseta del Real Madrid en el Santiago Bernabéu.

Su coste y las buenas referencias que traía desde Lyon han jugado en su contra. La paciencia es una virtud que se marchó hace bastante tiempo del estadio blanco. La sequía goleadora del galo y su apatía sobre el terreno de juego le condenaban a la suplencia en favor de un Higuaín que es el polo opuesto. Por la entrega de uno y otro se puede alimentar el debate sobre quién debe ser el '9' de Mourinho; por calidad no.

La previa del partido ante el Auxerre se llenó de tópicos en torno a lo poco que se jugaba el Madrid. Esta idea no la debían de compartir jugadores como Pedro León, Granero o Benzema; conscientes que era una gran oportunidad que no debían dejar pasar. Mientras los dos primeros suspendieron estrepitosamente, el tercero acabó poniendo a la afición de su lado.

Su primer gol fue de oportunista, de saber buscar un balón servido por un CR7 que cuando se disfraza de extremo parece más letal que en otras demarcaciones. El segundo sirve para definir a Benzema: desmarque, control exquisito y definición con la zurda. Aún quedaba la guinda. Sorin cae en la trampa de Karim que le ofrece la línea de pase como salida; el guardameta galo pica e intenta pasar el balón a su defensa, Benzema la roba y eleva con maestría para poner el cuarto en el marcador.

Acabó el partido y Arbeloa buscó el balón para regalárselo a su compañero. Todos quieren que Benzema saque todo el potencial que tiene dentro. Si Karim sonríe más a menudo será síntoma de que a este Madrid de Mourinho le irán las cosas muy bien.

Publicado el 9 de diciembre de 2010 a las 13:45.

El partido entre el Ajax y Real Madrid desprende un olor inconfundible a la tradicional Copa de Europa. Sin embargo, este invento mercadotécnico de la fase de grupos ha descafeinado un encuentro que haría sentarse frente al televisor a millones de espectadores. Por historia debería ser el encuentro de la jornada; por situación clasificatoria es uno más de los que se juegan esta semana.

El contexto es ideal para que Mourinho por fin dé entrada a la segunda oleada. Aparcado el debate sobre la conveniencia de las rotaciones, el portugués parece dar un motivo menos para la crítica dejando en Madrid a Carvalho, Khedira e Higuaín; tres jugadores de los que conforman la columna vertebral de este equipo.

Y es que por mucho que lo nieguen unos y otros, tanto culés como merengues afrontan esta jornada de Champions pensando en el 'Clásico' de la semana que viene. El calendario invita a no tomar riesgos y tanto Khedira como Higuaín se quedan en casa para recuperarse de sus lesiones. La exclusión de Carvalho atiende a razones de descanso. Con 32 años, el luso no puede mantener el mismo ritmo de minutos que sus compañeros de zaga.

Será por tanto una buena oportunidad para algunos jugadores de reivindicarse. Si Benzema quiere recortar los metros de ventaja que le saca el 'Pipa' en estos momentos, deberá destaparse con una gran actuación en el Amsterdam Arena. Más difícil lo tiene Lass quien ya sabe que Mourinho no está muy contento con sus prestaciones. Tampoco está viviendo buenos momentos Albiol. El valenciano volverá al once en un partido en el que deberá frenar a Luis Suárez y El Hamdaoui, sin duda lo más potable de este Ajax.

Un punto basta a los blancos para lograr su objetivo de ser primeros; muy poca exigencia para un partido que llega antes de que los madridistas se jueguen media temporada.

Publicado el 22 de noviembre de 2010 a las 15:30.